NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS (13/OCT/2012).- Michael
Jackson era el artista de entretenimiento definitivo, supervisando cada
detalle de sus espectáculos desde la cuidada coreografía a las
lentejuelas y perlas cosidas a mano en sus elaborados trajes, según su
antiguo diseñador de vestuario.

La fallecida estrella del pop es
conocida por su música y sus bailes característicos, pero también por
su estilo, que abarcaba desde ropa y accesorios militares a guantes con
joyas incrustadas, sombreros y chaquetas con intrincados adornos.
En
un nuevo libro, "The King of Style: Dressing Michael Jackson" ("El rey
del estilo: Vistiendo a Michael Jackson"), Michael Busg, el hombre que
diseñó y creó el vestuario de Jackson durante 25 años hasta la muerte
del cantante en 2009, ofrece una mirada entre bambalinas a la
emblemática superestrella y el desarrollo de su estilo propio.
"La
ropa tenía que girar en torno a la forma en la que actuaba", dijo Bush a
Reuters en una entrevista telefónica. "Quería que sus trajes, o sus
disfraces, fueran tan interesantes en una percha como cuando los llevaba
puestos. Era una capa añadida de refinamiento y detalle que proyectaba a
su público".
Todo lo que Jackson vestía era una extensión de lo
que hacía en el escenario, con el baile jugando un papel crucial en los
diseños. Le gustaban la pedrería y las cuentas porque reflejaban las
luces del escenario.
Así, Bush señaló que si los estadios eran
más grandes, los pantalones de Jackson se volvían más cortos, para
mostrar mejor sus calcetines con pedrería.
"A Michael le
preocupaba que la gente en la última fila pagara lo mismo por verle
actuar que la gente delante, así que nadie se quedaba sin el espectáculo
que estaba proyectando, porque todo el mundo podía ver lo que hacía",
explicó el diseñador.
Cada uno de los entre 800 y 900 diseños
que hicieron para Jackson Bush y su socio Dennis Tompkins, que murió el
año pasado, son llamativas creaciones para una estrella del pop. El
libro recoge fotografías detalladas de muchos de ellos, junto con
bocetos y fotos de actuaciones.
Sin embargo, y pese a su fama y
riqueza o los caros zapatos de diseño que recibía como regalos, Jackson
siempre actuó con zapatos Florsheim, que pueden comprarse en la mayoría
de los centros comerciales de Estados Unidos.
"Aprendió a bailar
con Florsheims. Eran cómodos y eran lo que había llevado como estrella
infantil", señala Bush en el libro, que se publicará el 23 de octubre.
"Michael
era un hombre de muchas paradojas, muchas de las cuales pudimos
representar en la ropa que diseñamos: rígidos cortes militares que
también eran elásticos y móviles, atuendos rebeldes, aptos para
comandantes del Ejército y vestidos sobre el corazón de un hombre
amable; elaborados adornos para un hombre bendecido con una discreta
humildad; ropa única hecha a meno combinada con zapatos Florsheim
gastados y arañados", dice Bush en el texto.
Jackson, de 50
años, murió en Los Angeles en junio de 2009 por una sobredosis del
anestésico quirúrgico propofol, que estaba tomando para ayudarle a
dormir. Su médico personal, el doctor Conrad Murray, cumple una
sentencia de cuatro años de prisión por homicidio involuntario. |